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A cinco años de la inserción del home office, la modalidad que transformó el ámbito laboral

Cuáles son las claves para combinar trabajo con vínculos externos.

Foto archivo LMN

Hace cinco años, la pandemia de COVID-19 transformó radicalmente el ámbito laboral en el mundo entero. Las oficinas, antes centros neurálgicos de actividad, quedaron vacías, y el trabajo remoto se convirtió en la norma. Hoy, en 2025, el home office se ha consolidado como una modalidad establecida, pero el modelo híbrido emerge como la opción preferida por muchos empleados.

Según un estudio realizado por WeWork y Michael Page, el 83% de los trabajadores argentinos ya adopta el modelo híbrido. Este enfoque combina la flexibilidad del trabajo remoto con la interacción presencial, permitiendo a los empleados equilibrar sus responsabilidades laborales y personales. Además, el 82% de los encuestados manifestó sentirse más feliz y saludable con esta modalidad.

Sin embargo, no todas las experiencias han sido positivas. La empresa española Holaluz enfrentó una crisis interna al eliminar el teletrabajo y reducir beneficios sociales, lo que llevó al 25% de su plantilla a declararse en huelga indefinida desde enero. Esta situación resalta la importancia de gestionar adecuadamente la transición entre modalidades laborales para mantener la satisfacción y productividad de los empleados.

A cinco años del auge del home office, el modelo híbrido se perfila como la opción más ventajosa para muchos trabajadores, combinando lo mejor de ambos mundos y adaptándose a las necesidades cambiantes del mercado laboral.

Las claves del home office

-Definir un espacio de trabajo. Existen tantas experiencias de home office como colaboradores en cada organización. Tenemos quiénes conviven con su familia, los que están solos, los que tienen mucho espacio y los que tienen menos posibilidades para acomodarse. Independientemente de cuáles sean las condiciones que cada persona tenga, es importante delimitar un espacio de trabajo, ubicarnos -siempre que se pueda- en el mismo lugar y que los elementos laborales tengan un sitio especifico.

-Generar una rutina diaria. Para poder trabajar desde casa es muy importante establecer límites claros entre el tiempo laboral y el tiempo personal y tratar de seguir una rutina que impida que el trabajo invada todo. El aseo y vestirse para el trabajo, aunque sea en el living de casa, es parte de esa rutina que influye positivamente en el estado de ánimo. Lo ideal es crear una rutina y establecer los objetivos y las prioridades del día sin descuidar los momentos de relax físico y mental.

-Fomentar la interacción social. El home office puede ser solitario, por lo que es importante organizar reuniones virtuales informales o actividades de equipo para mantener los vínculos y el sentido de unidad y evitar el aislamiento. Este tipo de acciones no solo mejoran el ambiente de trabajo, sino que también contribuyen al bienestar emocional de todo el equipo. Y si la ubicación geográfica lo permite, resulta ideal tener encuentros presenciales semanalmente.

-Mantener hábitos saludables. Ya sea en casa o en la oficina, resulta crucial cuidar las fuentes de energía como la alimentación, el ejercicio y el descanso, así como también tomar agua, pararse, y estirarse regularmente. Una alimentación balanceada, rica en frutas y verduras, ayuda a sentirse más liviano y lleno de energía para encarar la jornada laboral. Cualquier actividad física es buena para desconectar después de un día de trabajo intenso, y es una herramienta muy efectiva para aliviar el estrés y la ansiedad.

-Pausar las redes sociales para maximizar la productividad. Poner en pausa las redes sociales y notificaciones e, incluso, poner el celular en modo avión regularmente durante la jornada laboral es una gran estrategia para que el día rinda más. Así podemos poner toda nuestra atención en el trabajo a realizar y, luego de cumplida una tarea, podemos gratificarnos con un poco de distracción con el celular.

-Utilizar herramientas de comunicación efectivas. En los equipos remotos, una comunicación fluida es fundamental para alcanzar los objetivos proyectados, evitar los malos entendidos y ser productivos. Existen numerosas plataformas que ayudan a organizar el trabajo colaborativo, además de las rutinas de reuniones regulares para organizar el día, administrar proyectos, despejar dudas y complementarse entre colaboradores.

Con información de Clarín / LB24

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