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Guerra laboral en el Bingo: vuelan carpetas y acusan a psiquiatras de vender certificados

Un conflicto laboral que lleva años estalló esta mañana luego de una publicación de Infobae.

Según pudo saber la redacción de LA BRÚJULA 24, hace años que un grupo de empleados (nucleados en un sindicato) están en pie de guerra con el Bingo Bahía por las condiciones laborales.

Al parecer, directivos de la casa de apuestas enviaron a un trabajador a realizarle cámaras ocultas a, por lo menos, tres psiquiatras que -según publica Infobae- venderían certificados médicos, más conocidos como “carpeta”.

Fuentes consultadas de esta mañana en la Justicia local, sostuvieron que en -al menos- los videos que fueron publicados no se ven pedidos de dinero a cambio de certificados truchos, aunque sí se escucha que alguno de los profesionales dice que ayudará a “Emanuel” a poder salir del ámbito del Bingo -vía carpeta- mientras busca otro trabajo.

A continuación, lo publicado por Infobae:

Un joven al que no se le ve la cara consulta a un psiquiatra en un consultorio de Bahía Blanca. Necesita un mes de licencia en el bingo de la ciudad para probar suerte en otro trabajo. El médico le explica que puede hacerle el certificado por depresión. “El que va a tener el problema si te descubren sos vos - dice el doctor-. Te rajan del laburo”. Otro doctor va más allá y en la cámara hace la conexión del paciente con un abogado “para completar bien los papeles”. En la tercera cámara oculta, una psiquiatra emite el certificado en apenas 15 minutos. “Le vamos a poner stress laboral. No te preocupes no lo van a controlar, ni nada”. Enseguida, hace que el paciente pida un turno para el mes siguiente, para seguir con las licencias falsas.

Estos tres videos están vinculados con posibles negociados detrás del ausentismo en empresas privadas y en el Estado, que deberá investigar la justicia, a partir de la apertura de causas en el fuero provincial y federal. Los videos reflejan detalles de los abusos con los certificados médicos presentados por trabajadores estatales y de empresas privadas. Y pone en evidencia el rol de tres médicos reconocidos que trabajan desde hace años en la ciudad de Bahía Blanca. Los médicos psiquiatras implicados son Antonio A. De Luca (M.P. 1.149-0 – M.N. 52.891), Gloria E. Ulloque (M.P. 1.923 – M.N. 127.798 y Dr. Sergio Alejandro Guerstein (M.P. 1.145).

El certificado expedido por uno de los psiquiatras.

La metodología de estafa al Estado y a las empresas privadas no es nueva y se refleja en el flagelo del ausentismo mediante carpetas psiquiátricas. Las imágenes reflejan los detalles de los abusos con los certificados médicos presentados por trabajadores estatales y privados en la ciudad de Bahía Blanca. Hay tres médicos psiquiatras que aparecen en los videos. Los tres especialistas en salud mental toman con total naturalidad los pedidos de los supuestos pacientes. Ninguno se rehúsa a expedir el certificado por depresión o stress laboral sin necesidad de tener atención. Es más, le explican qué medicamentos tienen que “decir que están tomando” para que la mentira se vuelva creíble en sus trabajos.

En el material fílmico que aportaron fuentes periodísticas se puede observar a los médicos prescribiendo sobre la base de supuestos problemas de salud mental que terminan, generalmente, en una lista interminable de licencias “truchas” prolongadas. Incluso, según fuentes periodísticas, algunos profesionales emiten certificados “a distancia”, sin revisar a los pacientes que gozan de buena salud, pero viven en localidades alejadas de Bahía Blanca.

Los trabajadores estatales y del sector privado que presentan certificados apócrifos no sólo incurren en un delito grave en perjuicio del Estado y de empresas privadas sino que le quitan recursos a la sociedad en general que podrían invertirse en áreas esenciales como salud, educación o seguridad.

La falsificación de estos documentos condiciona de alguna manera a los pacientes que sí padecen alguna patología y necesitan presentar el certificado frente a las autoridades.

Otra problemática que deriva de los certificados falsos es la cantidad de millones de pesos pagados a empleados que no van a trabajar por algún “problema” de salud mental y el Estado o las empresas tienen que afrontar dichos gastos. La clave está en el rol que cumplen los profesionales involucrados del sector de la salud puesto que cobran el certificado entre 60.000 y 80.000 pesos para la atención particular de un especialista. Luego, el empleado presenta el certificado en la dependencia de Recursos Humanos correspondiente a su empleador y así obtiene la ansiada carpeta médica que lo exime de ir a trabajar, mientras sigue cobrando el sueldo todos los meses.

La falsificación de estos documentos condiciona de alguna manera a los pacientes que sí padecen alguna patología y necesitan presentar el correspondiente certificado frente a las autoridades. En los tres videos las consultas no duran más de 20 minutos cada una. Los médicos parecen acostumbrados a ese tipo de metodología. No los sorprende el pedido de los supuestos pacientes. Enseguida, toman su recetario y se ponen a escribir diagnósticos sobre problemas de salud mental que permitirán que los empleados puedan ausentarse de su puesto laboral por hasta un mes. Alguno de los psiquiatras hasta aconseja a los solicitantes de los certificados sobre la mejor estrategia para evitar ser descubiertos.

El video de las cámaras ocultas:


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