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El truco casero para que el ventilador refresque como un aire acondicionado

Un método fácil que no falla para convertir al ventilador tradicional en un aire acondicionado y ahorrar en la boleta de luz.

Los días de temperaturas por encima de los 30 grados llegaron y es conveniente estar bien preparados para enfrentarlos en forma eficiente y sin excederse con el consumo energético. Ante este panorama, te mostramos un truco infalible para optimizar las funciones del ventilador y lograr que enfríe los ambientes como si fuera un aire acondicionado.

El ventilador tradicional es uno de los aparatos que aunque tienen un gran vida útil y ayudan a economizar, no siempre es suficiente para combatir el calor extremo del verano.

Sin embargo, existe un método casi secreto que permite potenciar su función de enfriamiento del hogar, según cómo se lo posicione en cada rincón.

Con las tarifas de luz por las nubes, el ahorro energético pasa también a ser una cuestión fundamental en los meses de mayor consumo. En este sentido, el aire acondicionado, aunque efectivo, puede resultar en un gasto exorbitante.

El truco para que el ventilador refresque más

La táctica consiste en colocar el ventilador en posición horizontal apuntando hacia el techo del ambiente que se desee enfriar. Esto permite que el aire circule de manera uniforme por la habitación apoyándose en las leyes de la física: se empuja el aire caliente hacia arriba y en consecuencia, baja el aire fresco.

 La clave para ahorrar este verano en la factura de luz es mejorar el rendimiento del ventilador con estos trucos.

Otros tips para tomar nota

En las redes sociales aparecen cientos de “soluciones” para optimizar el rendimiento del ventilador en los hogares. Dos de las opciones más populares por su efectividad comprobada, incluyen un recipiente con hielo y una toalla mojada.

  • La primera alternativa consiste en colocar un bol u olla amplia repleta con cubitos de hielo. Añadir un poco de agua fresca y ubicar justo por debato del cabezal del ventilador. De este modo, el aparato “empuja” el aire frío que sube desde el recipiente.
  • La segunda opción requiere de una toalla mojada que luego se colozca detrás del ventilador (sin tocar la parte interna) para que el aparato emane aire más fresco en el ambiente elegido.

Fuente: LB24 / Crónica.

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