Seguinos

Noticias B

Obligarán a todos los presos a limpiar y hacer mantenimiento en las cárceles federales

La medida alcanza a los 12 mil internos de los 31 establecimientos del Servicio Penitenciario Federal. Rige para detenidos por delitos comunes, de alta peligrosidad y también los de lesa humanidad. “Hay que erradicar la cultura tumbera”, afirmaron.

El Gobierno amplió el programa “Manos a la Obra”, implementado por el Servicio Penitenciario Federal (SPF), con el objetivo de que todos los presos trabajen en las cárceles. Patricia Bullrich, en octubre pasado, destacó la importancia de esta iniciativa al anunciarla en la cárcel de Ezeiza, donde realizó actividades con mujeres detenidas. La exfuncionaria subrayó que este programa es un paso clave en la transformación del SPF y en la relación entre las personas privadas de libertad y su deuda con la sociedad.

El subsecretario de Asuntos Penitenciarios, Julián Curi, explicó que la medida busca reducir los tiempos de ocio de los detenidos y modificar la lógica de funcionamiento interno de las cárceles. “Hay que erradicar la cultura tumbera”, enfatizó Curi. La resolución 1346, publicada en el Boletín Oficial, destaca que la pena privativa de libertad debe procurar la reinserción social y la reducción de la reincidencia, según lo establecido en la Constitución Nacional y la Ley de Ejecución de la Pena.

La normativa señala que los internos no son víctimas, sino victimarios, y que el esfuerzo estatal debe enfocarse en que reparen el daño causado y adopten hábitos responsables. Además, alerta sobre los riesgos de la ociosidad en los penales, ya que esta fomenta la violencia y la subcultura delictiva, contrarias a los objetivos de reinserción social. En ese sentido, se enfatiza la importancia de que los internos participen en el mantenimiento y limpieza de los espacios carcelarios.

El documento también sostiene que estas actividades son obligatorias y se derivan del mandato constitucional que establece que las cárceles deben ser “sanas y limpias”. La participación en estas tareas busca promover una convivencia ordenada dentro de los establecimientos penitenciarios y beneficiar a la población carcelaria en general. Curi aclaró que estas actividades no constituyen trabajo remunerado y que los internos que se nieguen a cumplirlas enfrentarán sanciones, como la pérdida de beneficios por buena conducta.

Según el subsecretario, las obligaciones incluyen la limpieza y el mantenimiento de celdas, pabellones, patios, canchas de fútbol, lugares de visita y demás espacios comunes. Estas acciones están orientadas a fomentar hábitos de reinserción social, un elemento clave del tratamiento penitenciario. Curi remarcó que estas medidas no afectarán derechos fundamentales como las visitas familiares, pero sí se vinculan directamente con el cumplimiento de las normas internas.

Con información de Infobae

Más Leídas